La Virgen María, testigo incomparable de la obra del Espíritu

Pregunta fundamental: ¿Cómo reconocer la obra del Espíritu Santo en una persona?

Primer criterio: los frutos. El fruto bendito de las entrañas de María es Jesucristo mismo.

Segundo criterio: vivir el Evangelio. Lo más duro del Evangelio es amar a los enemigos. El centro del Evangelio es que Dios reine. El corazón del Evangelio son las bienaventuranzas. La prueba fundamental del Evangelio es la obediencia. El llamado primero del Evangelio es abandonar el pecado y seguir solo a Dios.

Tercer criterio: Paso de la lógica de la transacción a la lógica de la gratuidad. Capacidad de perdón. Donación desinteresada. Descentramiento de sí mismo y ventanilla en el amor a Dios y al prójimo.

Cuarto criterio: una vida de virtud constante, en la que brillan especialmente la humildad, y las virtudes cardinales y teologales.

Quinto criterio: Fecundidad y fruto en otras personas.