* Descubrir que ecesitamos ser sanados no es algo obvio. Es un lenguaje que parece distante a muchas personas--y muchos sacerdotes--que se sienten simplemente "normales." Por eso conviene estar atentos a algunos signos:

+ Desbordamiento emocional
+ Incoherencia grave y persistente
+ Espíritu de permanente crítica
+ Conflicto con toda autoridad
+ Desgano e insatisfacción profunda
+ Comportamiento predatorio
+ Refugio emocional
+ Dobles vidas
+ Narcisismo
+ Mitomanía
+ Relaciones superficiales o funcionales
+ Tendencia al "desquite"

* Aunque no existe un modoelo único, podemos dar algunas caraterísticas típicas de un corazón sano:

+ Madurez
+ Estabilidad interior
+ Realismo y razonable optimismo
+ Paz con el pasado, el presente y el futuro
+ Capacidad de respeto y cercanía
+ Reconoce los errores y aprende de ellos
+ Amistades firmes
+ Resultados consistentes en su labor