En este episodio vamos a sumergirnos nuevamente en el pequeño genio austriaco Wolfgang Amadeus Mozart.

Mozart es un personaje que ha levantado gran curiosidad a lo largo de su historia, por su genio, su precocidad y por las condiciones precarias de su vida. Se sabe por ejemplo que estuvo afectado por el llamado Síndrome de Tourette o que era masón, lo que se puede percibir claramente en obras suyas como la famosa ópera “La flauta mágica”.

En esta entrega, vamos a conocer una de las obras más famosas del repertorio Mozartiano. La obra se titula Eine Kleine Nachtmusik en su alemán original, lo que se puede traducir como “Pequeña serenata Nocturna”. Esta obra ha sido utilizada infinidad de veces en publicidad y cine y es probablemente la pieza más conocida de Mozart, y una de las piezas más universales de la música clásica, reconocible al oído de casi cualquier persona del mundo. Es bien conocido por ejemplo su uso en la famosa película de Ridley Scott llamada Alien.

La “Pequeña Serenata Nocturna” o Serenata para cuerdas núm.13 en sol mayor K.525 fue escrita en 1787, en plena madurez de la obra de Mozart, en el momento en el que estaba componiendo su obra Don Giovanni. Aunque fue compuesta años antes, no fue publicada hasta 1827, años después de la muerte del propio Mozart, cuando su viuda Constanze decidió vender sus derechos para su publicación.

La obra tiene un estilo enérgico, alegre y desenfadado y se agrupa en una forma clásica de cuatro movimientos, constituyéndose como uno de los pilares estructurales del clasicismo mozartiano.

Esta es una pieza compuesta para dos violines, viola, violonchelo y contrabajo. Si bien es una obra concebida para ser interpretada por un pequeño quinteto de cuerdas, es habitual escucharla interpretada por orquestas de cámara. Aunque el original hablaba de cinco movimientos, el legado que nos ha quedado se estructura en cuatro movimientos: Allegro-Romance Andante-Minueto Allegretto y Rondó Allegro. En su catálogo personal, Mozart mencionaba un segundo movimiento llamado Minueto, entre el primero y el segundo que nos han llegado, pero se perdió. El musicólogo Einstein indicaba que el minueto de la Sonata para piano en si bemol mayor K.498a es en realidad el famoso movimiento perdido de la Serenata nocturna, pero no se ha podido comprobar a ciencia cierta, a pesar de que después se han hecho grabaciones que han asumido esta tesis incorporando ese movimiento.

Sin más retraso, escucharemos esta Serenata para cuerdas núm.13 en sol mayor K.525 interpretada por la Camerata Viesgo de la Escuela Superior de Música Reina Sofía, dirigida por el maestro Giovanni Guzzo y grabada el pasado 16 de diciembre en el Auditorio Sony de la propia Escuela Reina Sofía.