En la antigua Grecia existieron varias religiones de misterio, una de ellas, estaba asociada con Trofonio, un héroe o dios, cuyo templo ubicado en Beotia, fue ampliamente conocido en la época antigua, debido a que tenía rituales que se asociaban con la noción del olvido, como un paso para conocer y aprender sobre el futuro, una idea que también exploro Platon en su Mito de Er.