El teletrabajo es un concepto con cada vez más aceptación en América Latina. Un estudio de 5G Americas determinó que, antes del coronavirus, Brasil era el país con más empleados trabajando desde sus casas, con 12 millones de teletrabajadores, seguido de México (con 2,6 millones), Argentina (con 2 millones) y Chile (con 500 mil).

Teletrabajar en la región hace ver que hay un choque entre dos mundos: el de la tecnología, que permite a muchas personas trabajar de donde sea (siempre que haya conexión a internet), y el de las regulaciones laborales, muchas de ellas conceptualizadas en el siglo XIX (en donde no existía ni se soñaba con las tecnologías que tenemos hoy en día).

El Banco interamericano de desarrollo, recoge en El Futuro del Trabajo en América Latina y el Caribe, cómo funciona y qué alcance tiene la regulación del teletrabajo en nuestros países y destaca que Colombia es el país más avanzado en este tema

Por su parte, la encuesta “Termómetro de Teletrabajo y Subcontratación” realizada por Mercer, consultora en Capital Humano, señala que estos cambios van a impactar de manera significativa a la economía de las empresas.

Los hallazgos señalan que un 59 % de las compañías encuestadas cuentan con servicios de personal subcontratado y que un 24 % de ellas ha buscado mitigar el impacto financiero a través de la disminución de incremento en salarios o la disminución de pago de bono. El 79 % registran que el personal subcontratado pertenece a servicios como limpieza, seguridad, comedor, entre otros.

El estudio apunta que entre los beneficios que las organizaciones consideraron para subcontratar personal se encuentran la reducción de costos (51 %), fortalecimiento del core del negocio (31 %), flexibilización de los recursos humanos (50.7 %) y la optimización del pago de PTU (18 %).

También puntualiza que absorberán el 85% del personal subcontratado, mientras que un 34 % de las vacantes internas fueron cubiertas por personal tercerizado en donde entra también el elemento de la subcontratación.

Otros hallazgos interesantes sobre la transformación del ecosistema laboral promovido por la pandemia también indican que 46% de las empresas ya contaban con un esquema de teletrabajo pre-pandemia y que de un 20 % a 26 % es el porcentaje estimado de la plantilla que pasará a trabajar remoto permanentemente.

La muestra estuvo conformada por 365 empresas participantes de diferentes estados de la República Mexicana. Entre las industrias se encuentran Servicios (no financiero), Automotriz y autopartes, equipos eléctricos, maquinarias, papel y productos afines, plásticos y productos de goma de bienes duraderos, Bienes de consumo, High Tech, Químicos, Bancos/servicios financieros, farmacéutica, Logística, (agricultura, pesca, bienes raíces, construcción, medio y entretenimiento) entre otros.

Dentro de los retos se encuentra también el que en algunos estados del país se ha descubierto que un mismo trabajador se contrata con distintas empresas de manera simultanea bajo un esquema de tiempo completo, lo que representa un reto en términos de cumplimiento para los corporativos, desde el manejo de la información, confidencialidad de datos, procesos, patentes, secretos hasta el rendimiento en las actividades.