Dios nos enseña que nos ha dado dos orejas y una boca para que oigamos más y hablemos menos. Es sabio entender los tiempos para hablar y el momento oportuno para escuchar y estar en silencio.
Dios nos enseña que nos ha dado dos orejas y una boca para que oigamos más y hablemos menos. Es sabio entender los tiempos para hablar y el momento oportuno para escuchar y estar en silencio.
read more
read less