GEORGIOS PAPANICOLAOU. La historia de un destrato
Georgios Papanicolaou, el hombre cuyo apellido es sinónimo de prevención femenina, tuvo
que padecer el destrato y la desidia que casi destruye su “sueño americano”.Salido de su Grecia natal, tuvo que tocar el violín en bares de mala muerte para sobrevivir y lograr la gloria.

A pesar de contar con los avales científicos más que suficientes, la comunidad médica de
los Estados Unidos lo ignoró por completo, hasta que un eminente científico (que conocía
su valía internacional), lo encontró con su violín a cuestas y le consiguió un puesto laboral
universitario que lo llevó a perfeccionar su Pap-Test, el simple estudio que salvó y salvará
millones de mujeres de las crueles garras del cáncer de cuello uterino.
El extraño ser humano cuando quiere puede ser un benefactor de la humanidad… pero
cuando quiere, también puede ser el peor enemigo de sus congéneres.
13-04-2024