Hoy les presentamos , azul en busca de amarillo. En la construcción de esta historia, azul intenta explicarse cómo se dieron las cosas en su vida, sus decisiones y en qué punto está en el presente. Los recuerdos y vivencias dan cuenta de una búsqueda por consolidar una imagen clara del futuro por el que está trabajando, intentando hilar, primero, hitos de su pasado para comprenderlo. ¿Tienes color tus emociones? ¿De que color sientes tú la alegría? ¿De que color sientes la nostalgia y la tristeza?

Hoy les presentamos soñar para seguir donde escucharemos, la historia de estrella, cómo se nombro la autora en su primer relato, ahora estrella ha culminado su proceso de reincorporación y nos relata cómo el pasado aparece una y otra vez en las noches, sin anunciarse, en forma de pesadilla o aviso. A través de la descripción literal de algunos de sus sueños, nos permite imaginarnos la difícil tarea de “desvincularse” del conflicto armado desde adentro, integrándose a la nueva vida de civil en la ciudad, lejos de su Putumayo de origen.. ¿Quién no sueña dormido o despierto para poder seguir viviendo?

La gran paradoja de Juan es que aunque no se siente orgulloso de su paso por la guerra, si no hubiese sido por ello, jamás hubiese podido acceder a las posibilidades de formación que se le abrieron con el proceso de reincorporación social. Lo más seguro es que estaría en su tierra de origen , raspando coca o trabajando en una mina, porque de sus once hermanos, era el único que había logrado llegar a la Universidad.

David fue reclutado en un grupo armado siendo tan solo un niño; aunque en el monte vivió las situaciones extremas que le pesan, agradece constantemente poder recrear su vida y llenar de esperanza a otros.

Ariel representa a cientos de niños, adolescentes y jóvenes que pasaron por la guerra y en la actualidad se enfrentan al reto de pertenecer, perdonar y perdonarse a si mismos.